"Ni el Poder ni la Gloria". Blog de Josep Esteve Rico Sogorb

Artículos de opinión e investigación sobre Historia, Lengua, Literatura, Arte, Cultura, Política, Sociedad, etcétera. La mayoría publicados en medios de comunicación en papel y digitales de todo ámbito territorial tanto en España como en el extranjero

martes, 15 de enero de 2013

¿LA INJUSTICIA DE LA JUSTICIA?

“Lo maravilloso de cada despertar es el poder de elección que poseemos”
Con esta frase empieza el libro como introducción a un prólogo que no es tal, que no es un prólogo a la tradicional usanza literaria sino toda una declaración de intenciones que la autora llama “PROVEEDORES DE FELICIDAD” y que dedica a sus seres queridos recalcando que con ellos no hace falta dar las gracias ni pedir perdón porque ambas cosas van implícitas en sus actos. 

Tania Miralles, autora, dedica este libro, de entre sus seres queridos, a las personas más influyentes en su joven e intensa vida: principalmente, a su madre, a su hermana y a su amiga de la infancia y en segundo lugar, a una serie de personas que Tania ha conocido allá donde ha estado por todo el mundo, sobre todo a gentes del campamento de Nepal y a unos ciudadanos judíos que tanto le marcaron durante su estancia en Israel. Sin embargo cabe destacar entre las dedicatorias de la autora, las dirigidas a las verdaderas y reales personas que inspiraron esta novela representadas en los personajes de Noah y Marcos, aunque estos nombres sean ficticios o seudónimos, de quienes Tania espera que se hayan visto identificados en la novela.

La obra contiene un anexo al final donde se detallan y se explican diferentes leyes como la Constitución española, el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal, relacionadas con el contenido del libro, con el propósito de que el lector pueda valorar por sí mismo la progresión de la historia, entender algún término o tecnicismo jurídico legal o si el concepto ‘justicia’ acorde a las leyes es llevado a cabo o no durante la sucesión de los hechos narrados en la novela, entre otros elementos. El anexo está incluido con el fin de agregar información, con lo cual no es imprescindible pero sí resulta interesante poder acudir a las leyes que rigen nuestro sistema y comparar la novelesca ficción con la realidad cotidiana.

La novela ha sido escrita en un total de cinco meses con muchos descansos, viajes y exploraciones personales durante el proyecto.

“Basado en hechos reales. Cualquier parecido con algún personaje vivo o muerto es mera coincidencia…” Obviamente es importante remarcar que este libro está basado no sólo en hechos reales sino que a pesar de que la imaginación de la autora ha jugado un papel importante, esta no queda lejos de la cruda y maravillosa realidad, según las circunstancias.

Tania como autora, busca en el libro, que el lector sintonice con alguno de los personajes, que traspase las barreras del espacio-tiempo y que de algún modo tatúe el libro en su mente de forma duradera. Si eso ocurre con usted, amigo lector, es que el trabajo de Tania algo bueno tiene, pero si alguien se siente ofendido tras leer el libro, por favor, que ponga los pies en la tierra: la novela ¡no está hablando de él, no está hablando del lector! La obra no busca ser políticamente correcta ni coquetear o adular al sistema, aunque yéndonos al otro extremo tampoco es un libro anti-sistema pues carece de odio o rencor; sino que es sencillamente realista, pero tampoco pasa nada, que nadie se escandalice porque la acción de la novela sucede por desgracia a menudo aunque sea excepcionalmente dentro de la regla.

Con un lenguaje sencillo pero claro y directo, de actualidad, de fácil entendimiento, con palabras coloquiales (excepto en las transcripciones de textos legales y jurídicos, lógicamente) pero sin ser enfarragoso ni pedante; Tania Miralles ha escrito este libro.

La acción se inicia en pleno centro de Alicante. El principal personaje masculino, Noah, inicia la historia hablando en primera persona y narrando su quehacer diario cotidiano y justo cuando temprano se dirige a coger su coche acompañado de un compañero de trabajo para ir a la oficina es detenido junto a su socio por un policía bajo la acusación de supuesto tráfico de armas y drogas.
Marcos, socio de Noah, es el siguiente personaje que la autora pone también en primera persona y que asimismo va narrando su detención. Ambos piensan el uno del otro y de si mismos, que cada cual está limpio, que cada cual es un pedazo de pan, que las acusaciones son falsas, que nunca han estado involucrados en ningún problema, que es imposible que esto vaya con ellos, que deben estar soñando; pero por desgracia todo es real. Tras un registro de domicilio acaban en comisaría detenidos o retenidos, según se mire…

Curiosamente, en otro capitulo, la propia autora, Tania Miralles, aparece como un personaje más, interpretándose a si misma (detalle autobiográfico) como una joven escritora inmersa en un proyecto literario (que es precisamente lo que ha hecho)y que a través de un amigo común conoce la situación de Marcos y Noah. Ellos le piden que les ayude publicando un libro con la historia, pues quieren hacer llegar a la gente la injusta situación que les tocó vivir. Tania, tras no pocas dudas, desconfianzas e inseguridades hacia ellos e incluso acerca de sus presuntas inocencias; accede a escribir la historia del sufrimiento por la detención. Se entrevista en el restaurante-barra El Pernil de Elche (lo que convierte a este emblemático y céntrico lugar ilicitano en escenario real y verídico de algunas escenas y páginas del libro) con los jóvenes afectados. Se da cuenta de que Noah es un chico dulce que jamás ha probado las drogas, que incluso no fuma tabaco y de que Marcos tiene un punto atractivo singular, de atleta, con su larga melena y obsesionado solo por su trabajo: la venta de coches. Así pues, a la escritora le cuesta imaginar a estas dos buenas y sanas personas entre rejas.

Marcos y Noah van relatando a Tania con exactitud y detalle la historia y las vicisitudes de su detención, matizando que durante la permanencia en la comisaría junto a delincuentes comunes, putas y yonquis; el trato policial dejaba de desear destacando las expresiones irónicas por parte de los policías. Lo peor fue que directamente les encarcelaron tras exigirles que se deshicieran de sus pertenencias y de los cordones de los zapatos.

A continuación se describe el cuadro psicológico-anímico: desesperación, angustia, ansiedad, desamparo, inquietud, nerviosismo, inseguridad y miedo de Noah y Marcos ante los interrogatorios policiales y sus encarcelamientos, ante el desconocimiento e incertidumbre de cuándo saldrán libres. Destaca la escena del cacheo e inspección anal que dentro de su descripción trágica se permite una ironía de las que suceden en situaciones extremas tensas.
Cuando Noah entra empujado violentamente por un guardia en su calabozo junto a las celdas de delincuentes de otras nacionalidades, entra en estado de shock. Describe angustiosa y claustrofóbicamente como es su celda. En ella conoce a su compañero, Carlos, ex alcohólico, suicida frustrado y pirómano, que además de contarle por qué está entre rejas, le explica como funcionan las cosas allí debido a su experiencia reincidente y le da ánimos diciéndole que pronto saldrá libre.

Marcos y Noah mantienen conversaciones a voces ya que sus celdas están próximas entre si. En sus diálogos Marcos, el más fuerte, consuela a su socio, que está apenado y hundido, llorando a rabiar, y al tiempo conoce la historia de su compañero de celda, un ladronzuelo colombiano llamado Fernando.

A partir de ese instante los protagonistas van describiendo todo lo que les ocurre: cómo les dejan la bandeja de comida, cómo tienen que hacer sus necesidades ante la mirada del guardia obligados a tener la puerta abierta, cómo duermen con una pésima colchoneta, cómo conviven hasta seis personas en la misma celda. ¡Qué les pase a ellos que son unos ejecutivos de clase media alta!
Comprueban que allí dentro, todo cambia de color, nada es lo que parece, hasta el yonqui más capullo puede ser la compañía más agradable. Si en la calle te apartas de esta gente y vale poco juzgar por las apariencias, a pesar de que no dejamos de hacerlo, en la cárcel pierde su sentido.
Una agente le aconseja a Noah que no vaya con ciertos tipos de personas en caso de que esté limpio y le informa que se está cociendo algo y saben perfectamente quién es traficante, quién está en cada nivel; por lo que le exige que no intente engañarse a si mismo ni engañar al sistema judicial mientras le desea suerte. Noah llora y no puede dormir aunque lo desea y queda afligido anhelando a sus seres queridos, deseando que todo sea una pesadilla de la que despertar. Pero no lo es, es real.

Se produce un salto en el argumento. El cuarto capitulo es el segundo encuentro o la segunda entrevista entre Tania, la escritora -testigo y cronista- y los jóvenes protagonistas Noah y Marcos una vez ya libres, reinsertados en la sociedad, tiempo después de toda la historia de la detención y cárcel. En esta segunda entrevista, los afectados explican las cosas que han aprendido, la moraleja o lección, acusados injustamente, detenidos, encarcelados; causándoles un evidente daño moral y psicológico.

Noah y Marcos admiten que en las celdas compartieron un sentimiento: “Represión, no podemos salir de aquí”, lo que evidenció que tenían con los demás presos algo en común, que los objetivos o sentimientos comunes siempre unen. Ambos se sintieron coartados al no poseer el más valioso de los derechos: la Libertad. Marcos habla con seguridad y pasión de sus ideas, ideas que denotan la crítica imperdonable con la que acusa al sistema judicial, a quién y de qué manera benefician las leyes.

Hay mucho de la autora ilicitana, de la verdadera y auténtica Tania Miralles en este capitulo y en todo el libro. Una novela cuyos capítulos son alternadamente interpretados por los tres personajes principales: Marcos, Noah y la propia escritora.

En cada capítulo su personaje narra en primera persona todas sus vicisitudes y refleja sus pensamientos. Los capítulos novelados, que siendo ficción están basados en hechos reales, son los de los afectados pero los capítulos de Tania son periodísticos (lo que muestra la vena de reportera y el espíritu aventurero que posee en la vida real dados sus estudios de Periodismo y sus viajes por el mundo) cuales reportajes y entrevistas que ella hace a Marcos y Noah, juntos o por separado.

Así pues, el libro es variopinto y se compone de distintas partes: novela o ficción, lenguaje jurídico legal, periodismo (reportaje, investigación, entrevistas) y realidad histórica.

Tania se autodescribe tal y como es, con su toque bohemio, citando los lugares que ha conocido. En este capítulo el personaje Tania escritora presenta a Noah y Marcos el borrador del libro que narra su historia y ellos le relatan cronológicamente con detalle lo que pasó: 1.- Mañana de su segundo día en el calabozo. 2.- Ingreso en la prisión alicantina de Fontcalent. 3.- Larga estancia en este penitenciario con el día a día de las relaciones humanas y la comunicación con los demás presos.

Se suceden las entrevistas de Tania intercaladas entre los capítulos personales de los personajes hasta llegar al final de la historia. Una historia cuyo fin no voy a desvelar, pues no tendría gracia, y porque la ha de descubrir el lector comprando y leyendo el libro.

Estamos ante un libro que a pesar de ser una crítica a una acción de la Justicia nos demuestra una gran lección de la vida, una moraleja totalmente positiva sin odios y sin rencores conminándonos a que, por si acaso, vivamos la vida intentando ser felices, eligiendo el camino de la bondad, eludiendo el Mal, evitando los riesgos al vislumbrar problemas, como si la vida estuviera en su último instante: mañana cualquiera de nosotros, honrados ciudadanos, podríamos ser Noah o Marcos.

“Lo maravilloso de cada despertar es el poder de elección que poseemos”.
Elige el libro de Tania Miralles “¿LA INJUSTICIA DE LA JUSTICIA?”. Y sé feliz. 

Por Josep Esteve Rico Sogorb

lunes, 31 de diciembre de 2012

El Anticuario de Toledo

Los autores del libro 'El Anticuario de Toledo', los ilicitanos Rafa Amorós y José Manuel López, dedican esta novela primera y principalmente a 'esos entrañables seres, que son la más imaginativa de nuestras creaciones: nuestros hijos'. No en vano este libro fue antes que todo, una idea surgida durante un acto de servicio patrullando (son policías municipales) dedicada a sus hijos: un cómic o historieta infantil de corte gracioso con un personaje tipo Tadeo Jones que sin embargo derivó y se metamorfoseó evolucionando hasta llegar a ser lo que ahora es, una novela seria y rigurosa, una novela interesante y de expectación con misterios a resolver sobre una base histórica y de leyenda y mitologías.

Ese cambio fue posible al percatarse de que la historieta daba para mucho y para algo más complejo y serio. Y pusieron la idea en manos de expertos que contribuyeron con sus consejos y asesoramiento a mejorarla tanto, tanto, que me atrevería a decir que hoy es tan buena como cualquiera de las novelas de Matilde Asensi, Pérez Reverte, Dan Brown o Ken Follet, prestigiosos y famosos autores que son ejemplos referentes a seguir en cuanto a similares temáticas dentro del género.

Los autores también dedican el libro y con agradecimiento, a sus familias y a sus amigos que les han asesorado, ayudado y aguantado esta 'enajenación mental transitoria' (como ellos autodenominan a su libro) y que es dedicarse a escribir: a Miguel Ángel Millán y Joaquín Juan Penalva por sus correcciones y consejos; a Mayte Vilaseca de Onda Cero y Cristina Martínez del diario Información, por ser los primeros periodistas que han dado a conocer esta obra incluso estando en estado embrionario; a esa simpática señora mayor del registro de la propiedad intelectual de Alicante, de la que desconocemos el nombre, por su simpatía y sus sinceros ánimos; al escritor Juan Eslava Galán por ser un ejemplo e inspiración, en el cual incluso se han basado creando un personaje en esta obra; al joven escritor José Ángel Antonio por sus brillantes apuntes; a Eva María Cores y José 'Morgan' por su aporte en la ejecución de la portada; a José Antonio Espinosa, José Antonio Zabala y otros muchos más por su valiosa ayuda brindada de modo desinteresado...; así que, por fin esta aventura ha sido posible, gracias a la ayuda y colaboración de estas personas.

Este libro, que es único y distinto a los demás, tiene semejanzas y coincidencias con otras obras. Digamos que parece una mezcla de ‘El Código Da Vinci’ con obras de Juan Eslava Galán y con el guión de la película ‘En busca del arca perdida’ de Indiana Jones (Steven Spielberg).
El libro comienza en un crítico momento histórico: en la ciudad de Toledo durante el inicio de la guerra civil en julio de 1936, tras el alzamiento del 18 y la legendaria escena del Alcázar y Moscardó.

De fondo planea el conocimiento acerca de la existencia de una reliquia. 'Toledo, esa enigmática ciudad de leyendas y de cuentos sobre fuerzas extrañas que pelean en su seno, sobre tesoros y reliquias, sobre espíritus, buscadores de conocimiento y misterios; es un lugar plagado de luminoso encanto en superficie y de oscuridad subterránea bajo su suelo. Puesto que bajo Toledo se esconde el otro Toledo, misterioso y oculto, plagado de cuevas, grutas y galerías que conducen y contienen la esencia de esos misterios, mitad leyenda, mitad realidad.'

La existencia de una cámara oculta subterránea bajo el suelo de Toledo guardando esa reliquia escondida durante 13 siglos y su hallazgo por un civil superviviente de un tiroteo con guardias civiles durante el episodio 'moscardiano', el traslado de la reliquia por la fuerzas nacionales al Alcázar, la orden gubernamental que Moscardó recibió instándole a devolver cierta pieza del patrimonio histórico nacional que obraba en su poder so pena de que de no hacerlo, el ejército del gobierno entraría a la fortaleza a recuperarlo; resultan aspectos claves para el posterior desarrollo de la novela.

Junto al coronel Moscardó, velando para que a dicha reliquia no le pase nada, está el personaje del sacerdote, el padre Rodríguez, que ha de acompañar a los porteadores de la reliquia para salvarla de caer en manos enemigas traslándola de sitio.

La histórica escena de la llamada telefónica a Moscardó incitándole a rendir el Alcázar y las palabras con su hijo que seria fusilado al no entregar la fortaleza resulta muy bien reflejada aunque hay un pequeño error pues el grado de moscardó en ese momento era de coronel, (fue posteriormente cuando Franco le ascendió a general), un mínimo lapsus perdonable que no influye para nada en la calidad de la obra y en el desarrollo de la trama y lógicamente explicable ya que las actuales enciclopedias de Internet (Wikipedia por ejemplo) se quedan con el último grado concedido a Moscardó cronológicamente: el de general, a la hora de presentar su biografía.

Digamos que toda esta escena es como un preámbulo, como una introducción para situar al lector, un inicio o embrión de la posterior trama. Si bien hay que decir que no es libro que trate, ni bien ni mal, ni de la guerra civil, ni del propio hecho del Alcázar, ni de la propia dictadura franquista de 40 años de vigencia. No es libro de Historia del Franquismo ni de la Memoria Histórica. Simplemente que la trama se inicia en un momento histórico concreto y ese fue el hecho militar en Toledo y ese fue el régimen que imperaba en aquel entonces. Si otro distinto hubiera sido el régimen de la época, igualmente se habría escrito la novela.

La trama empieza realmente en la actualidad, en 2010, en la misma Toledo pero setenta y tantos años después en una de las tantas tiendas de antigüedades que existen en Toledo, sobre todo en el casco viejo o centro histórico, tan cerca de los barrios judío y de los plateros.

La tienda de Julio Ballesteros, un anticuario toledano. La descripción del lugar, muy acertada, con una fisonomía exterior delantera de la tienda de aspecto mudéjar compartida con la parte posterior de estilo modernista donde el anticuario tenía su vivienda. La misma casa era su tienda y su vivienda.

El hallazgo de un autómata medieval...el ‘Hombre de Palo’, lleva a desvelar quien fue su autor: el italiano discípulo de Leonardo Da Vinci afincado en el Toledo imperial del siglo XVI llamado Giovanni Turriani, castellanizado como Juanelo Turriano; relojero, inventor, ingeniero de la corte del emperador Carlos V. Esto deriva en el descubrimiento de una reliquia de origen bíblico a la que se le atribuyó a la largo de la historia poderes sobrenaturales capaces de cambiar el mundo, de ver pasado, presente y futuro: La mesa de Salomón.

La trama o acción de la novela alcanza su punto intenso cuando tanto el Vaticano como el propio Estado y una organización neonazi se disputan hacerse con la reliquia para sus intereses.
El personaje de Juanelo Turriano está intrínsecamente vinculado con el autómata de madera y con la reliquia. Una reliquia que llegó a Toledo y que fue escondida en esta ciudad permaneciendo oculta varios siglos y descubierta durante el suceso inicial de la novela: el hecho heroico del Alcázar. Una reliquia que el régimen instaurado por los sublevados del Alcázar o sea, la dictadura franquista, puso a salvo volviendo a esconderla con el control tan solo de unos custodios de su secreto y de sus poderes (cuyos personajes aparecen en la novela) hasta que en la actualidad y tras mas de 70 años escondida, el principal personaje de la obra, el anticuario Julio Ballesteros, la descubre viéndose inmerso en una vorágine de acción, misterios, intrigas, violencia, suspense, asesinatos, conspiraciones junto a su socio en la tienda de antigüedades y a otros colaboradores; siendo todos ellos, personajes claves en la trama y su desenlace final. Un final que no voy desvelar porque han de descubrirlo ustedes.

Reconozco que la novela, sin ser autobiográfica, evidentemente, en ella los autores tienen un porcentaje de sus perfiles en los personajes y estos a su vez tienen parte de los mismos autores, o al menos de las aficiones y de las pasiones de Rafa y José Manuel por la historia antigua, por los secretos de la humanidad y por los misterios de temas inquietantes como Templarios, Cabala, Alquimia, Esoterismo, Gnosticismo o conocimiento de lo oculto.

El resultado final es una buena obra. Un libro de calidad con un estilo cuidado pero sencillo, natural, coloquial y actual sin caer en lo chabacano (incluso se permite algún taco propio del argot o trato entre colegas) para el narrador y los diálogos de los principales personajes de la actualidad.

Sin embargo, la parte histórica-documental sobre transcripciones literales y traducciones de textos antiguos en latín u otras lenguas es muy acertada, fidedigna y las explicaciones aunque parezcan de relleno en la novela, no lo son. Parecerán un rollo pesado. Pero no lo son. Es imprescindible y necesaria esa parte histórica-documental para el desarrollo de toda la trama porque describe el origen y la naturaleza de los misterios que encierra la novela y que los personajes tendrán que descifrar cuales códigos en clave para llegar al final de la cuestión: hallar la reliquia poderosa por la que pelean y hasta matan todas las partes implicadas: Estado, Vaticano, Neonazismo. Se nota pues, que sin ser historiadores profesionales ni especialistas, los autores han bebido mucho de múltiples diversas fuentes históricas y que se han documentado concienzudamente. La parte histórica – documental es muy acertada.

El libro está genial. Bien hecho. Bien iniciado, bien desarrollado y con un final en... (permítanme los puntos suspensivos aquí) que no voy a decir si es bueno o malo o si termina bien o mal pero que nos deja con ganas de más.

Y esta sensación de querer más que yo he sentido, que seguramente sentirán quienes lean la novela, es lo que hace que la obra sea buenísima.

Es cierto que, si bien la mayor parte del mérito es de los autores, también hay una mínima parte de éxito consecuencia de los asesores, consejeros, colaboradores y ayudantes que han tenido durante la creación y escritura de la novela. La idea como base, que los autores plasmaron inicialmente en su primer manuscrito original, es básicamente lo que luego se ha editado, aunque ellos tuvieron que reescribirla de nuevo experimentando así una posterior mejora que acabó puliendo la obra hasta llegar a culminar en lo que hoy ven ustedes, este libro. La correción ortográfica por especialistas ha rayado en la quasi perfección. Y todo ello, ya lo han agradecido con creces los autores.

Los autores no pregonan ni alardean de escritores, es más, saben que son noveles e iniciados en la literatura y que les queda mucho por perfeccionar, mejorar y aprender y en ello están porque escribir 'El Anticuario de Toledo les ha causado un síndrome, una enfermedad, un gusanillo, el ‘mono’, que solo se mata escribiendo...y a ser posible, publicando. Es el virus de la literatura que a todo el que empieza le contagia. De hecho ya están escribiendo su segunda novela por separado aunque también proyectan una segunda obra conjuntamente del estilo de 'El Anticuario de Toledo' pero con otro misterio, otro lugar, otra reliquia.

Esperamos ansiosos vuestras próximas obras y os deseamos suerte dándoos ánimo. Bienvenidos a la Literatura, pues.

Compren el libro y disfruten. El libro te va introduciendo, te engancha, te hace sufrir, te hace pedir más..yo quiero más y ustedes querrán más...pero...y...no, no, mejor descúbranlo ustedes. Pasen y vean. Muchas gracias y enhorabuena. 

Atentamente
JOSEP ESTEVE RICO SOGORB, Elche
(Mantenedor del acto de presentación del libro
y crítico literario de la obra)

(La presentación tuvo lugar el viernes 14 de diciembre de 2012 en la Librería Ali i Truc c/ Passeig Eres de Santa LLúcia, 5-7 de Elche ante un numeroso público que superó las 100 personas, pues abarrotó la librería resultando un éxito)


Josep Marín i Morell nació en el centro histórico de la capital autonómica, de la ciudad de Valencia, en 1932. Hijo de republicano valencianista, fue autodidacta haciéndose a si mismo desde su juventud en la dura postguerra. Representante de Farmacia, recaló en Elche donde casó con Marita Ferrer. 

 
Cuando los signos de identidad autonómicos peligraban al inicio de la transición, Marín crea Elche en 1976 el “Grup Cultural Ilicità Regne de Valéncia” (GCI) junto a su hijo mayor José Manuel (quién tuvo la idea) y junto a un amigo de éste llamado Leoncio Esclapez, con el objeto de defender y promocionar todo lo autóctono. 

Por aquel entonces, Marín es elegido miembro de la preautonómica “Taula del Pre-Consell” y de la “Coordinadora d’Entitats Culturals Valencianistes” de la que llegó a ser presidente.

Instaura en Elche los primeros cursos de valenciano del GCI por “Lo Rat Penat” para maestros y funcionarios desde 1978 a 1982 en la sede social de la entidad en la céntrica calle Daoíz.

Ingresa en “Unió Regionalista Valenciana” (URV), se asocia al “Grup d’Acció Valencianista” (GAV) y al “Patronato Histórico Artístico Cultural d’Elig” (PHACE) y funda “Unio Valenciana” (UV) en Elche siendo su cartel y candidato electoral y casi sale concejal en los comicios municipales de 1982 dentro de la candidatura de la entonces "Coalición Popular".

Defiende la Real Senyera arduamente en la epoca tristemente conocida como “Batalla de Valencia” participando en manifestaciones en pro de la identidad autóctona, corriendo peligro su integridad física, recibiendo amenazas y anónimos de muerte, aunque nunca se arredró: siempre se mostró valiente, osado y “echao pa alante”.

Firma la adhesión a las “Normes d’El Puig” para el valenciano y defiende una ponencia en el “I Congrés de la Llengua Valenciana” (que organizó el PHACE) en 1985 apelando a la unión y hermandad (germanor) o fraternidad entre todas las corrientes del Valencianismo y donde presenta el diccionario de la RACV junto al académico y decano de la misma, el poeta Xavier Casp en la Mutua Ilicitana (hoy Maz) en Elche.

Logra que la cuatribarrada catalana se reemplazara del balcón del Ayuntamiento por la Real Senyera Valenciana durante el mandato de Ramón Pastor como alcalde al inicio de la transición.
Es elegido directivo y cargo representativo de la Escuadra Romanos donde representa a César en el desfile de Pobladores de Elche.

Escribe opinión en la prensa ilicitana (“Canfali”, “Baix Vinalopó”, “Elche”, ‘Perfil de la Dama”…) sobre valencianismo e ilicitanismo con el seudónimo “Duende de las Casetas”.

Corresponsal deportivo del diario “Levante”, llega a entrenar asimismo a varios equipos infantiles ilicitanos de fútbol-sala que jugaban los sábados y domingos en el Parque Deportivo de Elche.

Crea en 1980 los prestigiosos galardones al Valencianismo e Ilicitanismo “Palmes Daurades” (que él llamó los “Nobel de la Valencianía”) convirtiendo Elche en la capital de la valencianidad al traer aquí a las más importantes personalidades valencianas y que hoy siguen siendo los decanos y más ilustres del ámbito valencianista.

Descubre al autoctonista y localista poeta ilicitano Tonico Sansano, a quién concede la “Palma Daurada”, propiciando después la modernización del GCI y de los galardones junto a la nueva joven directiva que hoy presido, apostando por el cambio actualizador de la entidad al apoyar que ésta se rebautizara con el nombre de Tonico Sansano.

Tras la debacle de UV se afilia a “Coalición Valenciana” que acaba abandonando decepcionado.
Recibe la “Palma d’ Or” y la “Presidencia Honorífica” del GCI por su trayectoria y méritos al frente de la entidad.

Aficionado del Elche CF y forofo del Valencia CF, funda la “Penya Valencianista Ilicitana ¡Ché, qué a gust!” bajo auspicio del GCI, última actividad antes de enfermar y de retirarse.

Josep Marin i Morell, "Pepe" para los amigos y como a él le gustaba que se le llamara, aunque fue capitalino al nacer en la capital autonómica, nunca fue centralista sino todo lo contrario. Para él, Valencia, no era solo la ciudad del Turia sino todo el territorio que incluye las tres provincias: Alicante, Castellón y Valencia. Por ello, sumó en sí mismo ambas identidades: Elche y Valencia y/o viceversa (lo local y lo regional) y sendos sentimientos: lo valenciano y lo ilicitano a la vez en armonía y equilibrio.

Jovial y alegre, aunque sanguíneo y pasional, siempre se sintió joven. Apostó por la juventud y se rodeó de jóvenes como yo en quienes confió. Eternamente le agradeceré que confiara en mí como su sucesor en el GCI. En el recuerdo quedarán sus vigorosos discursos, sus dedos en “V” de victoria por doquier, sus manos flameando “senyeres al vent”, sus brincos celebrando los goles de sus amados Valencia CF y Elche CF; y aquel “colpet” que daba con su mano sobre la mesa en tertulias, comidas, cenas, y reuniones.

Marín Morell fue un enamorado de la festividad del "9 d´Octubre" y acérrimo partidario de su celebración, asiduo asistente y participante en la procesión cívíca con su bajada de la Real Senyera incluida. En los últimos años y con su salud afectada dejó de asistir y con mucho pesar echaba de menos con añoranza no estar ante "su bandera, la bandera de tots els valencians". Marín vino a morirse unos días de esta festividad, nos dejó a vísperas de su querido "9 d´Octubre".

Aunque nos supuso un jarro de agua fría su pérdida o tal vez una "putada", lo cierto es que la mejor fecha que un valencianista puede "elegir" para fallecer es precisamente el "9 d´Octubre", y Marín se acercó bastante a ese "privilegio" falleciendo, sino el mismo día de esta festividad, al menos en su antesala, unos pocos días antes. Su ataúd fue cubierto por su propia real senyera valenciana y se le incineró con ella fundiéndose sus cenizas con las del máximo símbolo de identidad de los valencianos como es la bandera o senyera.

Pero Marín vivió toda su vida en el fondo de su corazón anhelando regresar a su ciudad natal después de muerto. Por eso, sus cenizas serán esparcidas por sus hijos en un acto privado en un bello lugar de la capital valenciana, a orillas del Turia y cerca de la Malvarrosa donde tanto paseó su admirado Blasco Ibáñez, otro valenciano, universal, que como Marín, también fue cubierto con su senyera en su entierro.

Marín, que tanto homenajeó a otros, se merece ahora que se le homenajee. Pronto lo haremos. Queda pues, Josep Marín i Morell en nuestros corazones y en la memoria histórica reciente de Elche y de la Comunidad Valenciana. Por siempre. In memoriam.

Por Josep Esteve Rico i Sogorb (Elche)
Presidente del Grup Cultural Ilicità Tonico Sansano

lunes, 2 de abril de 2012

Un desahucio tercermundista


Deberían, por humanidad, intervenir todas aquellas instituciones que, desde el origen y hasta hoy, tienen relacion con el caso tercermundista de un especial desahucio en Ceuta: Defensa y el Ayuntamiento o Gobierno autonomo ceutí. Anterior y actual propietario según reciente sentencia judicial, respectivamente, de la parcela F. R. 3859.

Al margen de las legalidades vigentes que unos y otros implicados argumentan y que seguramente justifican el desahucio, y aparte de los derechos ‘históricos’ de uno de los seis afectados residentes en dicha parcela, el ciudadano ceutí Antonio Moreno, por el uso del terreno como marmolista; lo cierto es que la situación tiene un cariz inhumano e insolidario que denota escasa sensibilidad al dolor ajeno y al sacrificio de casi 40 años de trayectoria laboral de este ceuti que de la nada creó y levantó su taller con el que sacó adelante a su familia con el permiso del titular entonces del suelo, el Ejército.

Urge valorar ambas posturas. Hay que ponerse en el pellejo del contrario y procurar o intentar entenderle. Si ahora es el gobierno autonomo ceuti el legal propietario de la parcela a consecuencia de una sentencia judicial y de unos acuerdos o convenios liberalizadores de terreno militar traspasandose a suelo civil; en vez de hacer oidos sordos, ignorar o ser indiferentes, cabría buscar y aplicar una solución pactada y consensuada para todas las partes relacionadas.

Esa solución ha de permitir a una parte, poseer el terreno, y al ciudadano afectado, mediante permutas, permisos, cesiones o arrendamientos a bajo coste; a cambiar de lugar y trasladar su marmolería a otro enclave donde no tenga riesgo de nuevo desahucio. Una ubicación donde no moleste y donde pueda seguir desarrollándose la labor profesional de su negocio de mármoles, por si mismo y por sus herederos.
Pero yo veo aquí algo raro. Al parecer, la marmolería de Antonio Moreno hizo en el pasado, trabajos para el gobierno ceutí durante años. Aquello se acabó. El propio afectado declara tener problemas y dificultades de competitividad con otras marmolerías de Ceuta mucho mas poderosas y boyantes. Ya saben, el pez grande intenta comerse al chico. Si esto es así o parecido, resulta lamentable. Como si el pez chico, -comerciantes y/o pequeños artesanos autónomos que son a pesar de las mejoras recientes los contribuyentes en peor situación del sistema laboral español- no tuvieran derecho a seguir subsistiendo, a existir. Y es que el sol sale a diario y para todos.

Si yo fuera Antonio Moreno, por defender el pan de mis hijos y nietos, hablaría con el presidente autonómico de Ceuta Sr. Vivas. No para mostrarle cerrazón empecinándome en que no me tiren del terreno sino para suplicarle por humanidad –algo de lo que carece la mayoría de los políticos y que sin embargo el presidente ceutí sí que posee- por caridad; una permuta, un cambio de lugar.

Porque Vivas, según dice la mayoría del pueblo ceutí por todos los rincones de la ciudad, es un buen hombre, como persona. Tanto como parece serlo el sufridor marmolista Antonio Moreno. Y las buenas personas, se entienden hablando, llegan a acuerdos y se ayudan mutuamente.

Da igual quien tenga la iniciativa de dar el primer paso hacia el otro y con el tiempo que resta para el desahucio –el 5 de febrero según orden judicial- claramente en contra.

Querer es mejor que poder. Además, la solución es posible si la opinión pública y la sociedad ceutí ‘condenan’ a Vivas y a Moreno -entre ambos anda el juego- a entenderse aunque sea por el bien de la imagen y del prestigio de Ceuta…

…sin tercermundismo.

Por Josep Esteve Rico Sogorb

Viajeros de madrugada

Una sociedad avanzada destaca, entre otras cosas, por contar con un sistema de transportes públicos adecuado a las necesidades de muchos ciudadanos por exigencias laborales o por no poseer vehículo propio.

Es cierto que el sistema de comunicaciones y transportes públicos ha mejorado notablemente y los medios utilizados, en general –salvo algunas excepciones y según qué sectores- están a la última en cuanto a tecnología, confort, comodidad y rapidez.

Elche es un importante enclave urbano que desde antaño viene manteniendo las necesidades de comunicación y de tránsito de personas con varias ciudades cercanas como Alicante, Orihuela, Murcia e incluso Castellón o Valencia, la capital autónomica.

Podemos decir que la ciudad del palmeral está bastante bien comunicada con éstas capitales a través de autocares y la red ferroviaria. Quizá la conexión no es buena por avión –con Castellón por ejemplo, donde no hay aeropuerto- o por barco, pues para ir a Mallorca, se debe partir desde Denia o Valencia.

Recuerdo hace años cuando de Alicante zarpaba un barco directamente a Palma. Lo malo es que tardaba 12 horas. Y en cuanto a los trenes, echo de menos algunas líneas activas lustros atrás y ya desaparecidas, especialmente de madrugada. Se podía ir y venir de Elche a Valencia después de las cero horas unas dos veces y hasta el amanecer, al menos en un expreso de largo recorrido que cruzaba todo el litoral mediterráneo.

A Alicante y Elche, por el camino más corto, les separan diecisiete kilómetros. Igualmente, ambas ciudades tuvieron años ha, líneas ferroviarias posteriores a la medionoche, de madrugada.

Ahora, al ilicitano o al alicantino que por motivos de trabajo, estudios, trámites, salud, negocios u ocio y diversión se le haga tarde sobrepasando las 11 de la noche, pierde el tren y ha de permanecer en el lugar hasta el amanecer sino no decide rascarse el bolsillo para volver a casa por prisas utilizando un taxi cuya carrera extra-urbana cuesta lo suyo.

Muchos jóvenes y mayores, para diversión y ocio,van de una ciudad a otra. No sólo en verano –‘en estiu tot el món viu’- en que se suele vivir más la noche sino también en invierno.

Ir de ‘marcha’ a Altabix o al ‘barrio’ alicantino no ofrece posibilidad en tren –tampoco en autocar- de madrugada. Las once de la noche es la hora tope. Si existieran líneas posteriores y hasta el alba –no es necesario cada media hora, pero si un mínimo de dos o tres servicios durante la madrugada- estoy seguro que muchas personas se apuntarían.

Los jóvenes pasarían del coche propio y hasta del ajeno, para mayor seguridad y tranquilidad, sin riesgos.
Sería conveniente que las autoridades competentes estudien esta situación y restauren, sino todas, algunas de las líneas anteriores y recuperen los servicios de madrugada por el bien común de los ciudadanos viajeros.

Por Josep Esteve Rico Sogorb

Medios y eficacia contra la Violencia de Género en Ceuta

Por regla, las estadísticas acerca de problemáticas sociales tienden a generalizar, a globalizar, y no registran excepciones como casos personales o hechos sectoriales.

En la casuística de la violencia de género -o de géneros, caben matizaciones- el porcentaje a nivel estatal sigue aumentando aunque exista una mayor sensibilidad social, judicial y administrativa con las víctimas.
Continúa en ascenso el ranking a pesar de la implantación de medidas, aunque un cierto número de situaciones no se denuncien por miedo a represalias y a pesar también de ese mínimo tanto por ciento añadido de demandas que resultan falsas.

Ceuta no es una excepción en este problema social. Sucede tanto como en el resto del Estado e incluso más. La violencia de género, sexista y doméstico-familiar en la ciudad 'caballa', afecta principalmente a mujeres, aunquelos malos tratos verbales y físicos no se detienen en la mujer, se ceban en menor porcentaje, en los hijos, niños y adolescentes menores, hasta en los jóvenes ya mayores de edad. Sin embargo, este tipo de violencia se denuncia menos.

Es cierto que al revés también se da, de hijos hacia progenitores y que éstos, aunque reacios, ya han empezado a presentar demandas, mayormente en la península.

En cuanto a las denuncias de maltrato de hombres contra mujeres, tendencia que se inició en otras autonomías, Ceuta se ha estrenado con 23 casos, resultando este porcentaje cierto y mínimo pero digno de tener en cuenta.

Resulta significativo que el 64% de las femeninas víctimas de violencia de género en Ceuta sean mujeres bastante jóvenes que no sobrepasan los 30 años de edad. Concretamente, oscilando entre los 18 y los 30 años. Cada vez, más jóvenes.Este dato nos hace suponer que se trata de mujeres prácticamente recién casadas o emparejadas, con pocos años de matrimonio o de convivencia, seguramente unidas a sus esposos o parejas con edades tempranas y madres solteras.

Para descubrir estos aspectos tendríamos que pormenorizar cada denuncia y desglosar las estadísticas globales porque, la composición estructural de la sociedad ceutí demuestra que lamentablemente la violencia de género es desigual según la étnia. Por ello cabría hacer algunos matices.

Desgraciadamente hay factores y rasgos étnicos que favorecen el surgimiento de tales casos. Así como es penoso reconocer que la violencia y el delito se desarrollan más en las capas sociales marginales y precarias con escasas formación y cultura, en las sociedades pluriraciales y multireligiosas -casos de Ceuta y Melilla- es, en el seno de los colectivos necesitados y empobrecidos como el musulmán, con tradiciones discriminatorias basadas en la supremacía masculina e ideas arcaicas u obsoletas -viéndose bien pegar a la mujer y vejarla sexualmente-, donde más violencia de género existe.
 
Es triste la existencia del polinomio 'étnia-religión-violencia', porque los constitucionales preceptos 'raza' e 'ideas', grandiosas palabras humanistas con bellos y profundos significados fraternos, no deberían generar violencia o delito alguno y menos aún provocar rencores u odios xenófobos y racistas que contribuyen negativamente en la convivencia social. Que el ser musulmán, hindú, judío o cristiano, no sea mirado ni prejuzgado con recelo ni influya para nada en las condenas por cualquier delito, especialmente en los casos de violencia de género.

El encrudecimiento de la violencia de género en Ceuta evidencia la no funcionalidad de las campañas preventivas y de las medidas adoptadas como el alejamiento o condenas 'suaves' incumplidas, que no han logrado reducir las denuncias ni el índice de casos.

A todo ello se añade que los medios policiales para cumplir las medidas protectoras a las víctimas son insuficientes. Sigue aumentando la violencia de género pero el número de agentes policiales no se incrementa para poder atenderla como se requiere. Además, es insuficiente que un único funcionario gestione la tramitación de denuncias en la Oficina de Atención de Ceuta porque con tales porcentajes trabaja saturado. Urge pues, colocar a otro funcionario para descongestionar y fluidificar el servicio.

La evidente descoordinación entre los distintos cuerpos policiales para atender a las víctimas resulta preocupante.Y lo más patético y tercermundista, propio de la administración de una república bananera, es sin duda, el retraso de varios días en el traslado de denuncias entre oficinas de la misma ciudad sitas en el barrio de Los Rosales y en el céntrico Paseo Colón, a escasos kilómetros una de la otra.

Como ven, todo este cuadro es de lo más lamentable y demostratiuvo de que en Ceuta, hay cada vez, más tercermundismo. Y me pregunto ¿hasta cuando? Porque, no se merecen las víctimas, tales precariedades administrativa y policial sino suficientes medios y más eficacia.

Por Josep E. Rico Sogorb

'La magnitud de la tragedia'


'La magnitud de la tragedia' no es el título de una novela sino el nombre de una exposición plástica y gráfica de poesía visual, aunque bien podría serlo, pues resulta sugerente y sugestivo llamar de tal forma a cualquier creación artística.

Las palabras 'magnitud' y 'tragedia' encierran profundos y amplios significados muy universales. Nos ofrecen la posibilidad de imaginar, de suponer, de plantearnos preguntas sobre la gravedad, la crudeza y la fuerza de extremas situaciones humanas como el dolor, el drama, la violencia en general, el odio y el amor; conceptos que el autor de la muestra ha reflejado y expresado en cada una de las obras de la exposición.

Lo que cada cual entienda por 'magnitud' y 'tragedia' creo que se aproximará bastante al pensamiento del artista. De momento, el título -muy acertado- ya nos atrae, provocándonos interés y curiosidad con cierto halo de misterio que lo hace atractivo.

El título nos llama a descubrir todo un universo de situaciones, casos y hechos en el mundo capaces de sensibilizar a las personas más frías e insensibles de mente y de corazón. El artista logra destapar los sentimientos a través de lo social, desde lo público o colectivo.

Las obras a exponer, creadas a través de la imagen y del grafismo, con el elemento plástico en todas sus facetas, técnicas y soportes; abordan el genérico dolor humano desde diferentes puntos de vista, ópticas, planteamientos y perspectivas.

'La magnitud de la tragedia' es la primera colección de una trilogía que el jóven artista ilicitano Eduardo Boix López expone en su ciudad natal y que tendrá continuidad con dos muestras más sobre el amor y la violencia.

Una triple exposición que estoy convencido no pasará desapercibida ni dejará a nadie desmotivado o insatisfecho porque Boix es un 'JPSP' -Jóven Pero Sobradamente Preparado', un artista 'todoterreno', plural, íntegro, completo y multidisciplinar; moviéndose entre la literatura , la fotografía y el cine, con importantes premios en cada uno de estos géneros.

Posee el I premio local de narrativa 'La ruta del verbo-aeda' de la Concejalía de Juventud, el premio al mejor corto con 'Mi primera vez' en el Festival de Cinema Jove CAM-Ayuntamiento. Participó en los filmes cortos 'La partida de parchís' y ' Ultramoderna soledad' y colaboró como fotográfo 'free-lance' en el libreto del CD del grupo musical ilicitano 'Voodoo Child'.

Eduardo Boix es, miembro del grupo poético 'Abril 2005', relaciones públicas del 'Grup Cultural Ilicità Tonico Sansano' y pertenece a la Asociación Cultural y Editorial 'Frutos del Tiempo'.

Fue uno de los autores ilicitanos que leyeron poemas en el recital 'Poetas por La Libertad' que JJ.SS. organizó en homenaje a figuras como Machado, Hernández o Lorca, entre otros. Asimismo, participó en el I Encuentro de Poesía Experimental en Bilbao.

Ha publicado, cuentos en valenciano en la revista 'Cresol' de Valencia, relatos en castellano en la revista 'Mañana Ceniza' de la asociación 'Imágenes y Musas', en co-autoría con quien ésto escribe, el libro de poemas y relatos sociales 'Estas son nuestras ruinas' -'Cuadernos Imposibles' de Ediciones 'Frutos del Tiempo', Elche, junio de 2004- y cuentos sobre la Dama de Elche y su venida en diarios digitales e impresos.

Igualmente tiene publicados poemas en el libro colectivo 'Primer Paso' del grupo poético 'Abril 2005' -Elche, diciembre de 2006- junto a reconocidos poetas locales como Cebrián, Zapata, Cugat o Castaño, entre otros.

Los amantes y los curiosos del arte y de la cultura, tenemos una cita con Boix López y su obra 'La magnitud de la tragedia' este viernes 2 de febrero.

La exposición, organizada por el Instituto Municipal de Cultura de Elche, será inaugurada por el propio autor -que atenderá al público asistente- posiblemente acompañado de algún representante municipal, sobre las ocho de la tarde, en el hall de entrada del ilicitano Gran Teatro.

Por eso, les invito a saber qué 'magnitudes' y cuáles 'tragedias' nos descubrirá Boix, que desea mantenernos atentos con su exposición durante todo el mes de febrero. ¿No les pica la curiosidad? Pues, pasen y vean...

Josep Esteve Rico Sogorb